La Sociedad Española de Profesorado de Filosofía y la Plataforma de Filosofía quiere manifestar una vez más su rechazo y preocupación ante el nuevo currículo de Educación Obligatoria de Secundaria, en el cual, de nuevo, sorprende por la ausencia de la Ética y la Filosofía.
Una vez más nuestros políticos ignoran lo pactado en 2018 cuando todos los grupos parlamentarios apoyaron la Proposición No de Ley en el Congreso de los diputados en favor de incluir un ciclo completo de filosofía en secundaria y bachillerato.
La educación filosófica de nuestra juventud, nuestros futuros y futuras ciudadanos y ciudadanas, no es un mero capricho sino el resultado de un profunda reflexión de su conveniencia como ha reiterado muchísimas veces la UNESCO. La filosofía es una disciplina fundamental para una sociedad moderna y diversa en la que se necesita el uso de una reflexión crítica y ética para abordar los problemas actuales.
En el nuevo currículo de la nueva Ley de Educación la Filosofía ha sido una vez más ignorada y recortada. No aparece la Ética en 4º de ESO como venía siendo habitual, sino que la asignatura de Filosofía de 4º reclamada por la REF en su documento Posibilitar la posibilidad, sorprendentemente ha desaparecido de la oferta de optativas de secundaria y queda enteramente a voluntad de las comunidades autónomas. Esto pone en peligro la celebración de las Olimpiadas Filosóficas en su modalidad de Dilemas morales que se enfocaba para dicho curso.
Conviene recordar que la Filosofía es una asignatura que trabaja en fomentar el diálogo y el compromiso como resolución de conflictos. Parece que a nuestros políticos les falta mucha educación filosófica para hacerse cargo de aquello que aprueban en la oposición pero no tienen ninguna intención de cumplir en el gobierno.
No nos queda más que manifestar de nuevo nuestra decepción y cansancio de que la Filosofía siempre sea la pagana de los difíciles encajes en un currículo ya sobredimensionado y desequilibrado que pone el peso en unas asignaturas en detrimento de una formación más amplia de la persona. Reiteramos que hay sitio y lugar para todas y cada una de las disciplinas que componen un currículo más estructurado y con sentido, que no trate a los estudiantes solo como trabajadores productivos sino que sea una ventana de oportunidad en la formación completa e integral de nuestra juventud.
Junto a la Red Española de Filosofía (REF) y otras asociaciones filosóficas de todo el ámbito del Estado español, pedimos una reconsideración, a la luz de lo que significa el compromiso con la palabra dada y el respeto al criterio unánime de los docentes, y también del Parlamento como representante del sentir de la sociedad española, del gravísimo error que supone eliminar uno de los pocos elementos de consenso en materia educativa.